No empieces... no me interesas, no te das cuenta que estoy haciendo como si no existieras?.
No pude evitar escuchar a esa chica que pasaba por la puerta de mi casa diciendo esas palabras tan crueles, pareciendo que el receptor no sabia qué contestar y dandome cuenta que en realidad le hablaba a su telefono celular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario